Solo conecta la bomba de agua, presiona y deja que el globo se llene al tamaño deseado. El cierre magnético se activará automáticamente al separar la bomba.

El sistema integrado de cierre automático con imán sella el globo tan pronto como lo desconectas — sin fugas ni esfuerzo.

Sí. Están diseñados para ser llenados y vaciados muchas veces, ofreciendo más valor y menos desperdicio.

Son más resistentes que los globos de agua normales, pero si se rompen, puedes sustituir uno sin preocupación. Saturarlos del todo aumenta el riesgo, así que es mejor usar tamaños medianos.

Totalmente. El material es flexible y no presenta piezas pequeñas aparte del imán interno sellado. Ideal para supervisión infantil.

Después del uso, vacía el agua, deja que se sequen al aire y guárdalos en un sitio fresco. Listos para la próxima aventura.